lunes, 3 de febrero de 2020

Etosha National Park

Etosha es uno de los Parques Nacionales más antiguos, fundado en 1907 tiene ya más de 100 años de historia. En su web se puede encontrar todo tipo de información práctica, alojamientos y mapas.

Etosha, que significa "gran lugar blanco", comenzó ocupando una superficie de 80.000 kilómetros cuadrados pero tras sucesivas reducciones en la actualidad ronda los 23.000.



El Etosha pan, con 4.730 kilómetros cuadrados, fue originalmente un lago que se secó hace millones de años. Tiene unos 110 km de largo y unos 60 en su parte más ancha. Es tan grande que se dice puede verse desde el espacio. Sólo tiene agua tras lluvias muy intensas o en algunos puntos concretos de la parte este.



Al tratarse de una zona bastante seca y sin mucha vegetación en Etosha es bastante fácil avistar fauna salvaje, en especial herbívoros muy abundantes como jirafas, cebras, springboks, ñus... Los elefantes también suelen verse, generalmente en grupos pero los leones son algo más escurridizos y los leopardos aún más. Los rinocerontes negros, en peligro de extinción, tampoco son en teoría muy habituales pero nosotros vimos varios, algunos con crías, no sabemos si fue suerte o si se está recuperando su población.


Lo que sí es cierto es que esto, unido a que es un lugar muy accesible, libre de malaria y en el que se puede conducir tu propio vehículo (no imprescindible 4x4 salvo por comodidad y en determinadas zonas), lo convierte en una de las mejores opciones sino la mejor para iniciarse en los safaris en África y con un precio de los más económicos.



Como el resto de parques nacionales en Namibia es obligatorio pagar unas tasas para acceder a él. Estas son los precios diarios de Etosha:


  • 80 N$ por persona extranjera y 30 N$ para namibios.
  • 10 N$ por coche de menos de 10 plazas




En las puertas de acceso te hacen un permiso y el pago se realiza en los resorts de Okaukuejo o Namutoni (no en Halali).

El hecho de que se trate de un lugar tan seco, con mucho polvo, tierra o arenilla, y contrastes térmicos importantes, nos permite ver además curiosos fenómenos como las tolvaneras.




Son una especie de pequeños tornados o remolinos característicos de planicies áridas y aunque habíamos visto varias durante todo el viaje no habíamos conseguido captarlas con la cámara hasta que llegamos aquí.




Normas del parque


Una vez dentro del Parque hay ciertas normas que debemos cumplir para garantizar nuestra seguridad y la de los animales que allí habitan:
  • Velocidad máxima permitida en todo el parque 60 km/h salvo en los campsites que es 20 km/h
  • Prohibido acceder al Parque con mascotas
  • No hacer ruidos ni molestar a los animales
  • Prohibido circular por el Parque fuera de las horas permitidas (entre el amanecer y el atardecer)
  • Prohibido bajarse del vehículo, subirse en él, abrir puertas o sacar partes del cuerpo por las ventanillas o techos, fuera de las zonas habilitadas. 


Para comer o ir al baño, además de los resorts, hay zonas valladas con WC en distintos puntos del Parque donde está permitido bajarse del coche, aunque algunas de ellas no dan mucha confianza ya que el cercado no está muy cuidado.





Pero sobre todo lo más importante siempre: sentido común y disfrutar!!





Alojamientos


Nosotros optamos por pernoctar dentro del Parque las 4 noches que estuvimos en Etosha. De hecho cuadramos los días y el recorrido para que así fuera. Aunque es más caro que los camping y lodge de fuera, que pueden rondar los 200 NAD por persona y noche, a nosotros nos parecía que podía compensar porque ahorras tiempo y tienes acceso a las charcas de cada uno de ellos durante la noche.
Una vez pasado lo recomendamos totalmente, vimos escenas alucinantes en alguna de ellas (decenas de elefantes bebiendo, rinocerontes luchando en Halali o leones en Olifantsrus).



El principal problema es que están muy solicitados, es una de las zonas más turísticas del país sino la que más, y conviene reservar con antelación sobre todo si no queremos dejarnos el sueldo en el intento. Nosotros lo hicimos unos 2 meses antes y ya nos costó cuadrar fechas para quedarnos en todos los resorts. Es cierto que hay unos más demandados que otros y si no hay preferencias, y sobre todo fuera de julio y agosto, es más factible encontrar.

Como viajamos con un 4x4 con tienda de techo nuestra prioridad eran las parcelas de camping por ser las más económicas y finalmente conseguimos organizarlo para quedarnos una noche en cada uno de los campings dentro del Parque (hay algún resort más pero sólo con habitaciones o chalets, sin opción de acampar):

Se puede ver la disponibilidad de cada uno y hacer reservas online a través de la web de National Wildlife Resorts.


Todos ellos abren sus puertas con el amanecer y cierran con el atardecer (a las 7:25 y 18:25 respectivamente a mediados de junio). El horario cambia cada domingo y está indicado con relojes junto a las puertas.



Por otro lado, en general el check-in se puede hacer a partir de las 12 y se debe dejar libre antes de las 10 de la mañana, aunque cada resort puede tener sus propios horarios según el tipo de alojamiento.


Tras habernos alojado en los cuatro, si tuviéramos que recomendar uno por calidad de su zona de acampada probablemente elegiríamos Namutoni, teniendo en cuenta que al dormir en la tienda de techo del coche no sabemos cómo es de duro el suelo para tiendas de campaña. Pero no es un camping con mucha afluencia de gente y los servicios están bien.


Sin embargo en lo relativo a las charcas la primera opción sería Halali seguido de Okaukuejo, aunque si tuviésemos que quedarnos sólo con uno sin duda sería Halali por su ubicación. Además de su waterhole tiene alrededor otros muy interesantes y no nos pareció tan turístico como Okaukuejo.




Aunque no podemos opinar sobre ellos, algunos camping que miramos fuera del parque son:


Charcas


Aunque en Etosha hay más de 60 charcas o waterholes, no todas ellas tienen agua, especialmente en épocas de sequía como la que vive actualmente el país.

Nosotros contábamos con un libro sobre cada una de las charcas que nos habían prestado unos amigos que estuvieron en el país hace unos 7 años pero muchas de las que calificaban como Permanent water ya no lo eran. En el mapa actual que venden en las tiendas de los resorts diferencian entre naturales y creadas por el hombre. Por desgracia, muchas de las primeras están secas a día de hoy.

Podemos encontrar algo de información sobre ellas en esta web pero aquí van nuestras recomendaciones.

En los alrededores de Namutoni destacaríamos estas dos charcas:





  • Klein Namutoni


  • Situada a poco más de 2 kilómetros del camping de Namutoni es una charca ideal como primera aproximación al llegar al Parque si se accede por la puerta este (Von Lindequist gate) o para verla justo antes de regresar al camping o al salir por la mañana.



    Nosotros la tenemos un cariño especial porque fue la primera que visitamos cuando llegamos a Etosha. Ya casi al atardecer, la luz era mágica y tuvimos la suerte de ver jirafas bebiendo, springboks e incluso un elefante en medio de la carretera camino a ella. 







  • Kalkheuwel


  • Sin duda de las mejores de la zona, muy famosa entre los fotógrafos. En realidad es un abrevadero artificial pero esto hace que el agua esté garantizada atrayendo a numerosas especies. 



    De hecho, los alrededores de Kalkheuwel son al parecer una de las zonas con más posibilidades de ver leopardos, encaramados en alguno de los árboles cercanos, ya que hay más vegetación que en otras zonas del Parque. Nosotros no tuvimos tanta suerte pero al llegar nos encontramos una gran manada de elefantes bebiendo tan tranquilos.



    Compartían espacio con gallinas de Guinea, impalas de cara negra, cebras...




    Al rato los elefantes comenzaron a marcharse, poco a poco, uno tras otro, verles casi resultaba hipnótico.



    Aunque por su enorme tamaño resultan impresionantes, cuando en el grupo hay alguna cría la imagen es enternecedora.




    Allí se quedaron el resto de animales, entre ellos las cebras. Como los elefantes abultan e imponen bastante, normalmente cuando ellos llegan a las charcas el resto de animales se alejan unos metros o si se acercan a beber lo hacen con cuidado, recuperando el espacio cuando se marchan.



    Pero la gran sorpresa vino en forma de rinoceronte negro!




    Apareció de repente haciéndose notar, resoplando y estuvo por allí unos minutos, bebiendo agua y merodeando.




    Pero lo más llamativo fue cuando decidió marcharse, no sabemos si se aburría o sólo trataba de marcar su autoridad, pero asustó a todos los animales cercanos antes de irse como un matón de barrio.



    En cuanto a la parte norte de Namutoni para nosotros fue un poco decepcionante. Nada más abandonar el camping al amanecer rodeamos Fischer's Pan pasando por los waterholes de Twee Palms y Aroe que estaban secos, algo que se agradecería señalizaran al inicio porque la vuelta completa son unos 30 kilómetros.



    Apenas vimos fauna más allá de algunos ñus no demasiado cerca, springboks y aves y lo mismo nos sucedió al acercarnos a Groot y Klein Okevi, donde sólo encontramos un par de impalas de cara negra.






    Sin embargo por lo que habíamos leído esta es zona de guepardos y el año anterior en las mismas fechas los compañeros de Con límite infinito los habían visto cerca de aquí. Pero hay que asumir que con la fauna salvaje es así, puedes ir un momento y que haya de todo y que al rato no haya nada, es lo bueno/malo de no estar en un zoo.



    Cerca de Namutoni están también las charcas de Koinachas y Chudop. En la primera vimos una avutarda de Kori, una de las aves más pesadas que existen y springboks.




    Y en la de Chudop encontramos más herbívoros: oryx, cebras, springboks y gallinas de Guínea, ya que se parecen a ellas pero de color negro.





    Los alrededores de Halali son quizá los más interesantes y donde encontramos más fauna durante nuestra estancia en Etosha:

    • Goas: una de las charcas con "permanent water", por lo que sobre todo en época de sequía puede estar muy frecuentada, aunque nosotros no fuimos muy afortunados con los avistamientos aquí



    • Rietfontein: es otra de las que en teoría atrae mucha fauna, incluso leopardos, pero nosotros sólo encontramos el cadaver de una jirafa, aunque eso significaba que había habido caza recientemente... Por lo demás es una charca agradable, con algunos árboles alrededor, bonita al atardecer


    • Salvadora: aunque de las 2 ocasiones en las que nos acercamos a ella sólo vimos un grupo de ñus y no tenía agua, el entorno es muy fotogénico gracias a su acacia, que además dicen en ocasiones alberga algún leopardo







  • Sueda: aunque no tenía agua, y de hecho es de las zonas más secas pareciendo incluso una salina, las 2 veces que nos acercamos a ella vimos algo, en una ocasión avestruces y en otra una leona tumbada.












  • Charitsaub: Al tener agua a diferencia de otras cercanas es más sencillo encontrar algún animal en sus proximidades. Y justo esto fue lo que nos pasó a nosotros, aunque quizá la charca no sea tan bonita como otras y a veces está seca, allí vivimos uno de los momentos mágicos del viaje: nuestros primeros leones! 





  • Había cachorros y varios adultos, primero separados y luego los machos se quedaron con las crías mientras las hembras se iban no sabemos si en busca de comida.




    Además al tener la charca cerca pueden saciar su sed en cualquier momento.




    Los descubrimos porque llamaron nuestra atención varios coches parados mirando en la misma dirección. Estar pendientes de estas cosas o preguntar a otros turistas puede darnos muchas alegrías.  


    Camino de Okaukuejo hay varias charcas con mucha vida, especialmente de herbívoros pero también podemos encontrar otras especies más curiosas. De hecho en esta zona, entre Sueda y Homob vimos nuestro único felino, un guepardo tumbado a los pies de un árbol pero muy muy lejos. Sólo lo descubrimos gracias a un par de coches parados que nos explicaron donde buscar exactamente, sino hubiera sido imposible.







  •  Homob: pese a ser natural contaba con agua y de hecho fue la única en la que encontramos patos. También vimos springboks y cuando llegamos había un grupo de elefantes bañándose en el barro pero por desgracia justo se marchaban




  • Camino de esta charca el segundo día encontramos también una manada de ñus.









  • Ondongab: aunque la charca parecía estar cerrada y no se veía agua, queremos nombrarla porque de camino a ella vimos una jirafa, un rinoceronte negro y un pequeño steenbok.










  • Olifantsbad: destaca por su tamaño y por ser uno de los waterholes que cuentan siempre con agua. 



  • Cuando fuimos había un grupo de impalas y algunos oryx.




    De camino a ella se pasa por una zona de arbustos y vimos un coche parado en la carretera. Cual fue nuestra sorpresa al buscar en la dirección en la que miraban y encontrar entre el polvo levantado... una mofeta!!!







  • Gembsbokvlakte: es un abrevadero situado en medio de una inmensa llanura blanca, ideal para ver todo tipo de herbívoros como oryx, cebras, impalas, springboks... Recomiendan visitarla al atardecer para los amantes de la fotografía. 









  • Lo más curioso fue un grupo de avestruces en los alrededores que nos recordaron a los Beatles en su famoso paso de cebra de Abbey Road. 









  • Nebrowni: aunque no tiene mucho agua encontramos muchas cebras, springboks, oryx... 



  • Su agua proviene de un pozo perforado para aliviar la presencia de fauna en la cercana charca de Okaukuejo.



    Y cuando volvimos a pasar por aquí el día que nos íbamos de Etosha encontramos leones, ¡un macho y dos hembras!



    Mientras una de las leonas se acercaba a la charca a beber agua, la otra se alejaba de la zona y el león indeciso no sabía a cuál acompañar.



    Y enmedio de la indecisión nos deleitó con algunos rugidos, abriendo su enorme boca como el león de la Metro-Goldwyn-Mayer.


    Las leonas tenían la piel ensangretada, tanto las patas como el hocico, clara señal de que habían estado comiendo, probablemente lo cazado esa noche al alba.





    Finalmente el macho se decantó por una de las dos hembras, que se había alejado hacia una vaguada próxima entre la charca y la carretera.






    En este vídeo se ven alguno de los momentos que vivimos en ese rato:




    Por el contrario la cercana charca de Kapupuhedi suele estar seca.

    Al norte de Okaukuejo las charcas de Wolfsnes, Adamax y Natco por desgracia no tenían agua, están secas gran parte del tiempo. Pero tenemos que destacar la de Okondeka, no por su agua o su belleza sino por lo que podemos encontrar allí.


    Nos acercamos a esta charca porque unos amigos que habían estado hace años vieron leones aquí y parece que aún es una zona frecuentada por ellos ya que encontramos un par de leonas tumbadas junto a unos matorrales mientras delante de ellas, a una distancia prudencial, comían no sin cierta tensión springboks, ñus, cebras... 



    De camino habíamos visto restos de ñus muertos lo que da idea de que es zona de caza habitual.

    Al sur de Okaukuejo, camino a la Andersson's Gate, está la charca de Ombika.


    Aunque no es de las más bonitas, ya que está como en un hoyo, merece la pena entrar a verla de entrada o salida del parque.



    Nosotros encontramos oryx, springboks, facoqueros y hasta un gavilán gabar, ave nativa del continente africano.





    Por otra parte, camino a Olifantsrus el paisaje va cambiando y encontramos desde zonas muy secas hasta otras de más vegetación como el Fairy-tale forest, e incluso cruzamos el cauce de un río seco en Charl Maraisdam.



    Sin embargo, las distancias entre charcas son muy grandes y la pista sobre todo a partir de Duiwelsvuur está en muy mal estado, con muchas ondulaciones que nos hacen reducir a la velocidad a 20 km/h vibrando todo el rato, por lo que se hace todavía más largo.




    Todas son charcas artificiales pero algunas no tienen agua y la señalización no es buena. Aunque sí vimos bastante fauna no fue diferente a la de las zonas anteriores por lo que no recomendamos recorrer esta zona, especialmente si no se dispone de mucho tiempo.






  • Ozonjuitji m'Bari: es una de las charcas de "permanent water" y al estar en una zona bastante seca y con distancias grandes entre charcas suele recibir la visita de muchos herbívoros. 




  • Nosotros encontramos pasado el mediodía avestruces, jirafas, oryx, springbox...




    Pero sobre todo muchas cebras, incluso algunas con crías descansando en los alrededores.



    Al día siguiente de regreso a Okaukuejo volvimos a parar y de nuevo había cebras con crías, oryx y ñus, además de un montón de aves revoloteando alrededor.








    Además a pocos metros de allí vimos springboks tumbados, algo nuevo porque siempre les habíamos visto de pie, comiendo o moviéndose, así como restos de un oryx muerto. Alguno se había dado un festín por allí lo que nos indica que hay depredadores en la zona.








  • Sonderkop: aunque es artificial y parecía estar en obras fue en la que más especies diferentes encontramos. 







  • Jirafas, antílopes, gallinas de Guinea, eland, chacales, springboks, cebras... o incluso un águila.











  • Tobieroen: es la última antes de llegar a Olifantsrus y allí encontramos una jirafa, antílopes e infinidad de cebras armando algo de jaleo.








  • Duiwelsvuur y Teëspoed son otras dos de las charcas que hay de camino a Olifantsrus, pero la última pese a ser artificial no tenía agua y a la primera no encontramos el acceso ya que la zona estaba en obras.


    Por último de las charcas de cada uno de los resorts hablamos en sus entradas correspondientes:



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