viernes, 22 de diciembre de 2017

Día 2 Viaje Alaska (30/08): Talkeetna y vuelo en avioneta al sur del Denali


Aunque el día no amaneció demasiado bueno, con el cielo cubierto y lluvia intermitente, y el lugar para pernoctar no fue el mejor por el ruido del tren y los coches, nos despertamos mucho más animados y con ganas de empezar el viaje de verdad. Hay que reconocer que una de las cosas que más nos gustó de la autocaravana, sino la que más, fue la cama, súper cómoda y bastante amplia, lo que nos permitió descansar y recuperarnos de la paliza del primer día.

Esta jornada la íbamos a dedicar a visitar Talkeetna y llegar al Parque Nacional de Denali. Aunque había varios lugares de interés próximos a Anchorage, habíamos decidido dejarlos para la vuelta e ir con tiempo a Denali, donde teníamos hechas un par de reservas y evitar así contratiempos.



De camino a Talkeetna paramos en el Willow Lake, un lago bonito pero similar a muchos otros que encontramos en Alaska y un tanto inaccesible, ya que hay un montón de casas en su orilla y cuesta llegar hasta ella sin atravesar ninguna propiedad privada. Como iríamos descubriendo durante el viaje, al abandonar las carreteras principales es normal encontrarnos pistas de gravilla y aunque con una caravana se puede circular por la mayoría de ellas resulta bastante más incómodo por el ruido y porque nos obliga a ir más despacio.



Una vez en Talkeetna, lo primero que hicimos fue ir a informarnos sobre el vuelo en avioneta al Denali, aunque con el día que hacía no sabíamos si volarían ni si nos compensaría hacerlo. Esta gran montaña es la más alta de Norteamérica, con 6.190 metros de altitud sobre el nivel del mar y mayor desnivel entre su base y su cima que el Everest, siendo además el seismil más septentrional del mundo a tan sólo 3 º del círculo polar ártico. Hasta hace un par de años recibía oficialmente el nombre de McKinley en honor al presidente de EEUU William McKinley. Sin embargo, en Alaska siempre fue conocido como Denali que significa "el grande" en la lengua atabasca local.


Hay varias compañías que ofrecen este servicio aéreo: Talkeetna air, Sheldon air service, Alaska float plane, Fly K2... Nosotros optamos por la primera, por los precios y por las buenas referencias que habíamos leído en el blog Sal y Descubre. Además es fácil de localizar, está señalizada en la carretera del aeródromo.




sábado, 16 de diciembre de 2017

Día 1 Viaje Alaska (29/08): vuelo ida Bilbao - Anchorage con escala de varias horas en Frankfurt


El primer día del viaje iba a ser muy largo: el avión salía desde Bilbao a las 6:45 y tras una escala en Frankfurt de varias horas llegaríamos a Anchorage alrededor de las 16 de la tarde hora local, o lo que es lo mismo, a las 2 de la mañana hora de España. A partir de ahí quedaría ir a recoger la caravana, hacer una gran compra para proveernos de todo lo necesario y buscar un sitio aceptable donde pasar la noche. En resumen, más de 24 horas sin dormir.

De hecho el viaje comenzó la tarde anterior ya que la noche previa al vuelo dormimos en casa de unos amigos en Barakaldo (mil gracias Cris y Pedro!!). Ese día nos levantamos sobre las 4:15, ya que el aeropuerto de Bilbao abre a las 5 de la mañana y a menos veinte habíamos reservado un taxi con Epictransfers. No solemos coger muchos taxis y nunca habíamos reservado a través de Internet, pero siendo para esas horas nos pareció lo mejor y fue un acierto: a la hora acordada nos estaba esperando en la puerta de casa y en menos de 15 minutos estábamos en el aeropuerto. Nosotros habíamos hecho el pago en el momento de la reserva (dan opción de cancelación gratuita hasta 24 horas antes del viaje) por lo que no tuvimos que entregar nada más.

Una vez en el aeropuerto tocaba facturar y desayunar y esto último lo hicimos en la única cafetería que había abierta antes de pasar el control de seguridad con los precios habituales de aeropuerto: colacao a 2,50 €, menú a 7 €...

La primera parte del vuelo Bilbao - Frankfurt estaba operado por Lufthansa, pero como habíamos comprado el billete completo en Condor nos dieron todas las tarjetas de embarque al facturar y no tuvimos que preocuparnos de la maleta hasta el destino final.

En este primer trayecto, que salió puntual, nos dieron desayuno gratis, una especie de mini-trenza con bebida a elegir entre zumo, té, café y agua y llegamos a Frankfurt sobre las 9. El aeropuerto internacional de Frankfurt es impresionante, probablemente de los más grandes por los que hemos pasado hasta ahora. De hecho, el avión tras aterrizar cruza una autovía por encima para llegar a la terminal y en varias zonas del moderno edificio de salidas hay zonas audiovisuales, duchas, consolas de videojuegos, etc.



Como nuestro siguiente vuelo no salía hasta las cuatro de la tarde y hacía buen día decidimos acercarnos al centro de Frankfurt para hacer más amena la espera. No habíamos buscado mucho, sólo que había trenes de cercanías que conectaban con la ciudad y seguimos las señales hacía los andenes. Compramos un billete de grupo para ese día (válido hasta 5 personas) por 16,40 €, porque coger ida y vuelta eran 9 € por persona y esto salía mejor. Aunque según los horarios de los tablones nos pareció entender que pasaban cada 15 minutos estuvimos bastante rato esperando. Hay que tener precaución con el andén ya que hay tres y aunque el 1 y el 3 van en el mismo sentido, este último es para trenes regionales que pasan con menos frecuencia. Nosotros tardamos un rato en saberlo, hasta que nos lo comentó un señor muy simpático que debió vernos un poco perdidos...

En apenas un cuarto de hora el tren nos deja en el centro. En nuestro caso nos bajamos en Frankfurt Hauptbahnhof, la majestuosa estación central.



viernes, 8 de diciembre de 2017

Alaska 2017 - Planning de un viaje especial


Supongo que todos a los que nos apasiona viajar tenemos una lista de destinos soñados que nos gustaría hacer realidad algún día, aunque por desgracia esa lista suele ser demasiado larga y somos conscientes de que salvo que nos toque la lotería será difícil completarla, por lo que con cumplir alguno de ellos nos solemos conformar. En nuestro caso al menos son unos cuantos: Nueva Zelanda, Alaska, safari en África, Canadá, islas Lofoten, Machu Pichu, la Antártida...

Si podemos cada año nos gusta hacer un "gran viaje", que no tiene porqué ser muy lejos pero si especial y algo más largo que el resto de escapadas que hacemos durante el año. Pero este año era todavía un poco más especial y decidimos lanzarnos un poco a la piscina y elegir un destino de la lista de soñados para nuestra luna de chocolate :)

Por fechas, precios e interés quedaron como finalistas Alaska y Canadá y tras buscar información y sin mucho tiempo para darle vueltas nos quedamos con el primero. Desde el primer momento teníamos claro que queríamos ir con la casa a cuestas, llevarnos nuestra furgo no era una opción pero un roadtrip en autocaravana nos apetecía mucho. Por lo que vimos, ambos destinos salían parecido de precio y Alaska nos atrajo algo más por el tema de la fauna salvaje, teníamos esperanzas de ver alces, caribúes, ballenas, bisontes y sobre todo osos, uno de nuestros animales favoritos.



sábado, 2 de diciembre de 2017

Escapada otoñal al Parque natural de Redes


Son muchos los lugares que nos quedan por visitar en el mundo pero a veces no hace falta irse muy lejos para descubrir rincones espectaculares que te dejan con la boca abierta. Y para nosotros esto se cumple cada vez que visitamos Asturias.

Esta vez le tocó el turno al Parque Natural de Redes. Aunque yo ya lo conocía tenía muchas ganas de volver y para José era uno de los primeros en su lista de pendientes así que aprovechando unos días de vacaciones hicimos una breve escapada para recorrerlo y disfrutarlo, si el tiempo nos lo permitía.

Redes tiene una extensión de 37.803 hectáreas, cubiertas en su mayoría por masas boscosas de haya, la especie vegetal más típica del parque ocupando 3/4 partes de toda su superficie. Está atravesado por una arteria principal, el río Nalón, uno de los más importantes de toda la región. Además en él habitan multitud de especies como osos, lobos, rebecos e incluso el urogallo, en grave peligro de extinción. Por este motivo fue declarado Parque Natural en 1996 y Reserva de la Biosfera en 2001. 

Teníamos por delante 3 jornadas enteras. La primera de ellas nuestro objetivo era la que probablemente se ha convertido en la ruta más conocida de todo el parque por su belleza y sencillez, la Ruta del Alba (track aquí).


Se inicia en la bonita localidad de Soto de Agues situada a tan sólo 2 km de Rioseco, capital del Concejo de Sobrescobio. Este pequeño pueblo nos impresionó por la gran cantidad de hórreos que acoge. A la entrada del pueblo hay un amplio aparcamiento donde dejar el coche.




Atravesando el pueblo encontramos una ancha pista hoy día asfaltada que durante años fue la vía de paso usada por pastores y arrieros para llegar al vecino valle de Aller.




Dejamos atrás un cuidado lavadero en cuya fuente podemos aprovisionarnos de agua y a los pocos metros encontramos las instalaciones de una piscifactoría de trucha. Esta zona se caracteriza por laderas de castaños y manchas de robles.